Efectos a Largo Plazo del Cuidado Materno Adverso en la Función del Eje Hipotálamo-Hipófiso-Suprarrenal (HPA) de Macacos Juveniles y Adolescentes
Autores: McCormack, Kai; Bramlett, Sara; Morin, Elyse L.; Siebert, Erin R.; Guzman, Dora; Howell, Brittany; Sanchez, Mar M.
Idioma: Inglés
Editor: MDPI
Año: 2025
Acceso abierto
Artículo científico
Categoría
Ciencias Naturales y Subdisciplinas
Licencia
CC BY-SA – Atribución – Compartir Igual
Consultas: 7
Citaciones: Sin citaciones
La adversidad en la vida temprana, como el maltrato y la negligencia, puede aumentar el riesgo de desarrollar trastornos psiquiátricos más adelante en la vida; esto se debe probablemente a los efectos sobre los sistemas de estrés en desarrollo del cuerpo. Aquí, examinamos este posible mecanismo biológico en una especie de primate no humano, el mono rhesus, donde el maltrato infantil por parte de la madre conduce a consecuencias de desarrollo que son similares a las de los humanos. Nuestra investigación anterior encontró que los infantes con esta experiencia adversa temprana tenían niveles más altos de hormonas del estrés (cortisol) durante sus primeros seis meses de vida en comparación con los animales no maltratados. Este estudio examinó si las hormonas del estrés seguían elevadas durante los años juveniles y adolescentes. A un año de edad, las hembras maltratadas aún mostraban hormonas del estrés elevadas, y todos los animales maltratados demostraron una regulación deficiente de la secreción de cortisol en comparación con los animales no maltratados. Sin embargo, los efectos de la experiencia adversa temprana sobre la secreción de hormonas del estrés desaparecieron en la adolescencia, mientras que en la adultez surgieron diferencias sexuales típicas en la secreción de hormonas del estrés. Estos hallazgos sugieren que los efectos del maltrato temprano sobre las hormonas del estrés pueden ser transitorios, al menos si la experiencia adversa se detiene. Comprender cómo nuestra biología responde, se adapta y se recupera del estrés en la vida temprana podría ayudarnos a desarrollar mejores tratamientos para las personas afectadas por la adversidad en la infancia.
Descripción
La adversidad en la vida temprana, como el maltrato y la negligencia, puede aumentar el riesgo de desarrollar trastornos psiquiátricos más adelante en la vida; esto se debe probablemente a los efectos sobre los sistemas de estrés en desarrollo del cuerpo. Aquí, examinamos este posible mecanismo biológico en una especie de primate no humano, el mono rhesus, donde el maltrato infantil por parte de la madre conduce a consecuencias de desarrollo que son similares a las de los humanos. Nuestra investigación anterior encontró que los infantes con esta experiencia adversa temprana tenían niveles más altos de hormonas del estrés (cortisol) durante sus primeros seis meses de vida en comparación con los animales no maltratados. Este estudio examinó si las hormonas del estrés seguían elevadas durante los años juveniles y adolescentes. A un año de edad, las hembras maltratadas aún mostraban hormonas del estrés elevadas, y todos los animales maltratados demostraron una regulación deficiente de la secreción de cortisol en comparación con los animales no maltratados. Sin embargo, los efectos de la experiencia adversa temprana sobre la secreción de hormonas del estrés desaparecieron en la adolescencia, mientras que en la adultez surgieron diferencias sexuales típicas en la secreción de hormonas del estrés. Estos hallazgos sugieren que los efectos del maltrato temprano sobre las hormonas del estrés pueden ser transitorios, al menos si la experiencia adversa se detiene. Comprender cómo nuestra biología responde, se adapta y se recupera del estrés en la vida temprana podría ayudarnos a desarrollar mejores tratamientos para las personas afectadas por la adversidad en la infancia.