Los modelos climáticos sugieren que para el año 2100, las temperaturas máximas de los ríos pueden acercarse a 27-31 grados C en áreas donde actualmente se desarrollan las larvas de lampreas del Pacífico. Se desconoce si las larvas de lampreas del Pacífico en entornos naturales pueden tolerar estas temperaturas. Combinamos estudios de laboratorio con encuestas de campo para evaluar si las larvas en condiciones naturales tienen esta capacidad. En un entorno de laboratorio, algunas larvas pudieron sobrevivir días en los que la temperatura máxima alcanzó 33.6 grados C. Los resultados también indicaron que la mayoría de las larvas pueden ser capaces de tolerar días en los que las temperaturas máximas alcanzan 30.8-32.0 grados C. Durante tres años de encuestas de campo, observamos larvas en áreas cálidas donde las temperaturas máximas durante el día variaron de 27.7 a 33.9 grados C. Nuestra capacidad para encontrar larvas en áreas que estaban cálidas, y en momentos en que estaban cálidas, fue similar a nuestra capacidad para encontrar larvas en áreas que eran relativamente frescas y en momentos en que las áreas no estaban cálidas. Estos hallazgos sugieren que las larvas de lampreas del Pacífico en entornos naturales pueden ser resilientes al calentamiento climático. Sin embargo, no está claro si las temperaturas en aumento pueden dañar a las larvas de lampreas del Pacífico sin causarles la muerte.