Las β-hexosaminidasas (Hex) son enzimas diméricas involucradas en la degradación lisosomal de glicolípidos y glicanos. Estas enzimas están formadas por las subunidades α- y/o β-codificadas por los genes HEXA and HEXB respectivamente. Las mutaciones de estos genes conducen a las enfermedades de Tay Sachs o Sandhoff, que son desórdenes neurodegenerativos causados por la acumulación de glicolípidos no degradados. Aunque las Hex derivadas de tejido han sido ampliamente caracterizadas, la información disponible sobre las β-hexosaminidasas recombinantes es limitada. En este estudio se produjeron Hex recombinantes lisosomales (rhHex-A, rhHex-B y rhHex-S) en la levadura metilotrófica Pichia pastorisGS115. Las actividades específicas más altas de las enzimas fueron 13.124, 12.779, 14.606 U .mg-1 para rhHex-A, rhHex-B y rhHex-S, respectivamente. Estos resultados fueron 25 a 50 veces más altos que los obtenidos de leucocitos humanos normales. Las proteínas se purificaron y se caracterizaron a diferentes condiciones de pH y temperatura. Todas las proteínas fueron estables a pH ácido y a 4°C y 37°C. A 45°C la rhHex-S se inactivó completamente, mientras que rhHex-A y rhHex-B mostraron alta estabilidad. Este estudio demuestra el potencial de P. pastoris GS115 para la producción de enzimas lisosomales poliméricas y presenta la caracterización de distintas β-hexosaminidasas recombinantes producidas en un único hospedero.
INTRODUCCIÓN
Las enfermedades de Tay Sachs (TSD, OMIM #272800) y Sandhoff (SD, OMIM #268800) son trastornos de almacenamiento lisosómico (LSD) conocidos como Gangliosidosis GM2. Son trastornos autosómicos recesivos causados por mutaciones en los genes HEXA o HEXB, que codifican para las subunidades α o β, respectivamente, de las β-N-acetilhexosaminidasas lisosomales humanas (Hex, EC 3.2.1.52) A, B o S [1, 2]. La TSD y la SD son clínicamente indistinguibles, salvo que en la SD están afectados el sistema nervioso central (SNC) y los órganos viscerales, mientras que en la TSD sólo está afectado el SNC. Clínicamente, estos trastornos se caracterizan por apatía, hiperacusia, debilidad motora, hipotonía, escaso control de la cabeza, disminución de la atención, aparición habitual de una mancha macular de color rojo cereza en la retina, convulsiones y un deterioro mental progresivo seguido de ceguera, sordera y espasticidad, que conduce a un estado de rigidez descerebrada. Los pacientes suelen morir alrededor de los 3 años de edad [3].
En la actualidad, no se dispone de una terapia específica para la TSD y la SD. No obstante, algunas terapias experimentales incluyen la terapia de sustitución enzimática (TRE), el trasplante de médula ósea o de células progenitoras neurales, la terapia génica y la terapia de privación de sustrato [4].
Esta es una versión de prueba de citación de documentos de la Biblioteca Virtual Pro. Puede contener errores. Lo invitamos a consultar los manuales de citación de las respectivas fuentes.
Artículo:
Síntesis y propiedades ópticas de puntos cuánticos CdSe/ZnS (Core/Shell) funcionalizados con tiol mediante intercambio de ligando
Artículo:
Propiedades antibacterianas de membranas fibrosas de PLLA con nanoplata
Artículo:
Soporte artificial de proteínas ligadoras de ADN como herramienta para el ajuste de la expresión génica y mitigación de la toxicidad proteica
Artículo:
Una investigación de la formulación óptima de NLC-Protector solar mediante el análisis Taguchi
Artículo:
Propiedades físicas y de tracción del papel de Sida rhombifolia hecho a mano