Respondiendo a las exigencias del sector alimenticio, Manuli Stretch lanza al mercado local Manfood®, film de polietileno, con el objetivo de preserva la calidad de los alimentos y aumentar la seguridad de los productos para consumo humano.
El Film de Polietileno Extensible (PE) es completamente reciclable y está pensado específicamente para el embalaje alimenticio, tiene un contenido de metales pesados decididamente inferior a los límites establecidos por la Directiva Europea 94/62/CE (100mg/kg), ofreciendo al consumidor la máxima garantía de seguridad.
La elevada extensibilidad y adhesividad, su eficaz comportamiento anti-condensación, transparencia y brillantez, hacen que Manfood® sea una fiable solución de embalaje para la correcta conservación de los alimentos y la utilización, también, en alimentos con un elevado contenido de grasas.
El polietileno tiene peso específico de 0,92kg/cm3, lo que lo hace ser más liviano que los film tradicionales con la misma cantidad de metros lineales. El uso de cantidades inferiores de material con respecto al estándar se traduce en un impacto ambiental reducido, así como en una disminución de los costos de empaquetado.
La preocupación hacia los nano y microplásticos y su impacto en el medio ambiente y la salud de los organismos vivos ha aumentado considerablemente. Actualmente, no existe una metodología de análisis estandarizada para estudiar la presencia de estos, pero las autoridades ya comienzan a restringirlos. Además, existe un obstáculo clave que impide realizar las pruebas oportunas sobre los micro y nano materiales: la disponibilidad limitada de materiales caracterizados y trazables biológicamente. Por tanto, para poder continuar con esta línea de investigación es necesario disponer de partículas que sirvan de referencia, es decir, que conserven la naturaleza química del material y que tengan el tamaño de partícula adecuado.
AIMPLAS avanza en nuevas tecnologías para la descarbonización y la transición energética de la industria y el transporte, a través de dos proyectos de investigación y desarrollo financiados por el Instituto Valenciano de Competitividad e Innovación (IVACE+i) y los fondos FEDER.
El equipo del proyecto MMAtwo, financiado con fondos europeos, presentó una tecnología para procesar residuos de polimetacrilato de metilo y convertirlos en materiales utilizables en una segunda vida.
El biomaterial desarrollado por el ICMM-CSIC se combina con campos magnéticos para crear una matriz que permitirá la colonización por células neurales de las zonas dañadas de la médula espinal.
Una mezcla de dicho fosfato cálcico -el cristal principal de huesos y dientes, que les confiere su dureza característica- y dióxido de titanio, puesta sobre láminas de metal de titanio, demostró tener una valiosa propiedad magnética que, al activarse con los rayos ultravioleta (UV) o energía solar, resulta muy útil en la eliminación o clarificación del agua contaminada con clorhexidina, sustancia presente en jabones líquidos, utilizados especialmente en entornos hospitalarios.
Mediante cámaras que recrean las fisuras de las rocas, investigadores alemanes han demostrado cómo los flujos de calor subterráneos pudieron enriquecer los componentes prebióticos y aumentar su reactividad, favoreciendo la aparición de los primeros organismos vivos.