La mezcla obtenida del plástico es inyectada en moldes metálicos en forma de ladrillos de 30x10 centímetros, llamados bloques CAX. Fuente Agencia de Noticias UN

Este proyecto fue escogido por la Cámara de Comercio de Tumaco, como el mejor trabajo de la asignatura Introducción a la Ingeniería. Fuente Agencia de noticias UN

Carol Yesenia Jiménez, estudiante de primer semestre de Ingeniería Química y perteneciente al Programa Especial de Admisión y Movilidad Académica (Peama) de la Universidad Nacional de Colombia Sede Tumaco, explicó que el proyecto formulado fue denominado “Planta transformadora de residuos sólidos Tumaco Green Home” o en español, Tumaco Hogar Verde.

Aunque apenas comienzan su formación profesional estos jóvenes ya buscan cómo aportar desde la academia al beneficio de Tumaco, la segunda ciudad más grande de la costa pacífica colombiana, con 171.300 habitantes asentados en una zona propensa a tsunamis.

Su propuesta consiste en la producción de una especie de ladrillo para mejorar la vivienda de este municipio de Nariño, por medio de la transformación de residuos plásticos reciclados y de poliestireno expandido (Icopor).

Steven Mendoza, también estudiante de Ingeniería Mecánica de la Sede Tumaco, aseguró que según la planta recicladora Tresol, en el relleno sanitario del municipio se vierten 30 toneladas de estos residuos diariamente, de ahí la importancia que cobra el proyecto.

El proceso de transformación de este material consiste en la recolección de los elementos, lavado, selección y triturado. Posteriormente, se pasa por la extrusora, una máquina que funde el material, obteniendo así una mezcla que es inyectada en moldes metálicos en forma de ladrillos de 30 x 10 centímetros, llamados bloques CAX.

Por su parte Yuliana Ramírez, estudiante de Ingeniería de Petróleos de la Sede, afirmó que la finalidad del proyecto es renovar la cantidad de casas que se encuentran en la zona palafítica (casas sobre madera en el mar), y reubicarlas en zonas firmes.

Según la estudiante, el trabajo muestra que la construcción de cada una de estas viviendas, de 36 metros cuadrados (dos habitaciones, sala, un baño y cocina), tendría un costo de 15 millones de pesos y podrían ser construidas en tres días.

“Con esto buscamos mejorar los factores ambientales, económicos y sociales de las personas que viven en riesgo, a orillas del mar. Además, dignificaría la labor de los recuperadores”, resaltó Yuliana.

Asimismo, explicó que gracias a este material dichas casas son resistentes a la humedad, un factor importante en una zona tan cálida, con una humedad relativa de 83.86 %.

A diferencia de las viviendas de madera, que se deterioran fácilmente, este material tendría una vida útil de 3.000 años, según estudios previos.

También destacó que dentro del proyecto incluyeron un sistema de pago, para que las personas aporten parte de sus casas con el material reciclado que recojan y lleven a la planta. “Esta es una ventaja que se agrega a los auxilios que el Gobierno pueda entregar”, aseguró la estudiante.

La idea es conseguir el apoyo gubernamental y de ONG, para continuar el proyecto. Se estima que el montaje de la planta transformadora de residuos plásticos tendría un valor de 600 millones de pesos.

Esta iniciativa fue escogida por la Cámara de Comercio de Tumaco como el mejor trabajo de la asignatura Introducción a la Ingeniería de la U.N.; por eso, estos estudiantes tuvieron la oportunidad de viajar a exponer los resultados en la Jornada de Proyectos y Trabajos de Estudiantes de Primer Semestre de la U.N., que se llevó a cabo en la Sede Bogotá.