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Entre la siembra de la semilla y la primera hija que tiene una planta de banano, transcurren almenos seis meses. Durante ese tiempo además de los fertilizantes y el cuidado del suelo y otros necesarios para garantizar su crecimiento, todos los días tiene que regarse, actividad que continua hasta su cosecha, proceso en el agua es gran protagonista.

"Entre el 70 y el 75 por ciento de banano es agua. No tener agua sería el acabose para una plantación de banano" explica Albeiro Alfonso Cantillo (más conocido como ‘Foncho Bananas’), un pequeño productor de banano de Zona Bananera (Magdalena) que se convirtió en el rostro y representante de los pequeños bananeros de Colombia ante el mundo.

Precisamente, el agua fue el tema que convocó el pasado 4 de noviembre a más de 50 participantes de entidades públicas, privadas y comunitarias al encuentro Conectándonos por la Sierra y la Ciénaga: intercambio de experiencias en gestión del agua. Luego de más de un año, la Plataforma de Custodia del Agua de las cuencas de los ríos Frío y Sevilla realizó su primer evento presencial, que tuvo lugar en el campus principal de la Universidad del Magdalena (Santa Marta).

El encuentro tuvo como entidades coanfitrionas a la Universidad del Magdalena, Corpamag, ASBAMA, Fedepalma, Cenipalma, el Comité de Cafeteros de Magdalena, Agrosavia, la Fundación Herencia Ambiental Caribe, Deltares, la Embajada del Reino de los Países Bajos, WWF Colombia y GSI-LAC.

La gestión y la gobernanza del agua en la región

Desde la Plataforma, un espacio de articulación y acción colectiva creado en 2015 y que hoy suma a una treintena de entidades públicas, privadas y comunitarias, se identificaron en los últimos meses varios proyectos o iniciativas en torno a la gestión y la gobernanza del agua en la subregión norte del Magdalena. “Justamente, este evento se enfocó en conectar esas acciones y actores que estamos trabajando por la conservación del agua, para generar y fortalecer la confianza, la articulación y el trabajo colaborativo, conversando desde diferentes miradas”, explica Dora Milena Zapata, especialista en gobernanza y planificación intersectorial de WWF Colombia.

La subregión norte del Magdalena es de especial importancia, pues allí se encuentran las cuencas de los cinco ríos que nacen en la Sierra Nevada y desembocan en la Ciénaga Grande de Santa Marta, y que le proporcionan parte del agua dulce que requiere este humedal Ramsar para mantener su equilibrio. Dos de esos ríos son el Frío y el Sevilla, de cuyas cuencas depende, además, el agua para cerca de 45.000 habitantes y para cultivos como los de palma, banano y café, principales actividades económicas del territorio.

En este escenario, la gobernanza toma un papel crucial ante las necesidades y usos que se hacen del recurso. “El concepto de la gobernanza del agua se refiere a la toma de decisiones y el establecimiento de acuerdos entre diferentes actores presentes en un territorio (sean empresas, entidades públicas y comunidades) para usar el agua, entendiéndose como un recurso común y de interés para todos.

Un espacio que le ha apostado a esto mediante el debate, la concertación y la materialización de proyectos conjuntos ha sido la Plataforma de Custodia del Agua”, apunta Dora Milena. 

El balance del evento

Después de una nutrida jornada en la que se compartieron información y experiencias, los participantes pudieron conocer alrededor de 13 proyectos o iniciativas que están desarrollando los sectores presentes en la subregión norte del Magdalena y el Caribe colombiano, relacionadas con eficiencia hídrica, gobernanza y mitigación y adaptación al cambio climático (ejes temáticos del evento).

Adicionalmente y como cierre de las presentaciones de las iniciativas realizadas por grupos temáticos, se realizaron paneles de discusión con expertos locales, nacionales e internacionales que ampliaron las perspectivas para proporcionar una visión más integral de la situación del agua en la región, y donde se generaron conclusiones en torno a los retos y proyecciones en la gestión del recurso en el territorio.

Eficiencia hídrica: usar solo el agua que se necesita

Productores como Foncho Cantillo reconocen que los caudales de ríos y sequias han disminuido con el tiempo y que, en la actualidad, cultivos como el banano sufren de muchas presiones. “Hace 30 años regábamos por desnivel o por inundación y desperdiciábamos bastante agua. La falta de recurso hídrico hoy nos ha llevado a pensar cómo modificar y hacer nuestra plantación, tecnificar nuestro riego, porque en algunas épocas muy largas sufre por sed, mientras que en otras hay demasiada agua”.

Frente a esta realidad, el llamado de la eficiencia hídrica es justamente el de usar solo el agua necesaria. “El evento nos permitió identificar que es muy importante un trabajo a nivel gremial y sectorial, pero sin olvidarnos de hacerlo también con los pequeños productores, así como tener una mirada integral a nivel de cuenca”, comenta Gabriela Parada, coordinadora de Proyectos de GSI-LAC y una de las invitadas del panel Solo lo necesario: la importancia de la eficiencia hídrica.“Obviamente, las acciones en finca y a nivel de predio son fundamentales, pero siempre deben articularse a esa mirada de la cuenca, buscando el equilibrio entre la demanda y la oferta”.

Y es que, la eficiencia hídrica, finalmente, le apuesta al uso racional del recurso hídrico, para mantener la rentabilidad de los sectores productivos, pero sin perder de vista que el agua no es solo para sus actividades, sino también para las comunidades y los ecosistemas y que debe sostenerse en el tiempo.

Información compartida para la gobernanza del agua

La articulación entre todos los actores presentes y el intercambio de experiencias es clave para contribuir a la gobernanza. Así lo señaló Juan Carlos Espinosa, Líder Ambiental de Fedepalma: “este encuentro es importante, porque un elemento clave de la gobernanza de un recurso común como el agua es aprender los unos de los otros. Somos varios sectores y tipos de actores que convivimos entre la Ciénaga Grande y la Sierra Nevada de Santa Marta y nos convoca el agua, cómo poder usarla de forma más eficiente, hacer que alcance para todos. En ese sentido, conocer lo que hemos hecho y lo que hemos aprendido y construir juntos es crucial”.

Esa es justamente una de las conclusiones más relevantes del segundo momento del evento, en el que se compartieron cuatro experiencias en gobernanza del agua. Además, se reafirmó la necesidad de seguir fortaleciendo la generación de información relevante, actualizada y útil para tomar mejores decisiones.

“Sin embargo, no se trata de quedarnos esperando a tener toda la información, sino trabajar con la que ya se cuenta. En este encuentro, nos dimos cuenta de que es bastante”, apunta Dora Milena. Desde el panel El agua: una responsabilidad compartida, se destacó que, a partir de la información que ya se tiene, es necesario pasar del diálogo a la acción colectiva en el territorio y articulada entre comunidades, entes territoriales, sectores productivos y la academia.

Cambio climático: un llamado a la constante adaptación

Cristian Guerrero y su familia son cafeteros de la Sierra Nevada de Santa Marta. Durante varios años tuvieron una finca de café en Minca, corregimiento de Santa Marta ubicado a 650 ms.n.m. No obstante, con los años la vocación cafetera de este territorio se fue perdiendo, pues el café requiere un clima templado para darse mejor. Hoy, aunque algunos cultivos de café persisten, el ecoturismo ha tomado más fuerza allí.

La familia Guerrero hoy tiene su finca en San Pedro de la Sierra (corregimiento de Ciénaga), cuya altura promedio es de 1350 ms.n.m. Este caso puede catalogarse como una muestra de los efectos del cambio climático. Se trata de uno de los grandes desafíos o retos que enfrentan estas cuencas y, en general, el país. Por ello, es crucial el trabajo para mitigar y adaptarse al fenómeno. Así se abordó en el tercer panel del encuentro.

“En este tema, pudimos ver que desde los sectores productivos se están desarrollando proyectos con esa mirada. Algo vital, pues este es un territorio que presenta épocas de escasez, pero también de inundaciones. Finalmente, el llamado es a adaptarnos constantemente”, destaca Vanessa Torres, líder local de la Plataforma de Custodia del Agua.

“Muchos de los actores estamos en ese camino de adaptarnos, de poder cada vez innovar y de tener herramientas tecnológicas que nos ayuden a ser más eficientes en todos los sentidos. Sin embargo, no podemos olvidar que las acciones diarias individuales y de cada sector también nos ayudan a adaptarnos”.

Retos y perspectivas de la gestión del agua

Para finalizar se realizó el panel “Agua para todos”. Uno de sus invitados fue Robert Proos, asesor sénior para el Departamento de la Cooperación y Desarrollo Internacional de la Agencia RVO del Gobierno del Reino de los Países Bajos. Robert resaltó la relación entre Colombia y su país, especialmente con la región del Magdalena, a través de varias cadenas de valor como la palma, el banano y el café.

Además de las conclusiones ya compartidas, este último espacio destacó la responsabilidad del consumidor en el uso del territorio y sus recursos; la importancia de la articulación intersectorial desde lo local y lo nacional; y la evidencia de lo interconectadas que están las diferentes regiones del planeta y, en ese sentido, es urgente seguir trabajando de manera articulada por la gestión y la gobernanza del agua.

Al respecto, Robert compartió con los asistentes y usuarios conectados a la transmisión por Facebook Live las perspectivas de su gobierno sobre el recurso hídrico: “Hemos iniciado varios proyectos en la región enfocados en eficiencia del agua. La combinación entre agua, clima y biodiversidad junto con la agricultura, es muy importante para los proyectos futuros enfocados en brindar apoyo técnico a los actores locales de la región. Nuestra política agrícola se enfoca en la circularidad y en la sostenibilidad. Pero, además, tenemos la Ambición Internacional del Agua, que le apunta a trabajar estos temas con actores locales de las cadenas de valor con las que tenemos relación”, en diversas zonas del mundo.

Y es que, como dice Foncho Bananas, “siendo el agua un recurso necesario para todo y para todos, es una responsabilidad compartida mantenerla; los pequeños, grandes y medianos productores sabemos que el agua es limitada, y que si no nos ponemos de acuerdo con los diferentes tipos de cultivo y con las diferentes regiones en donde nuestro recurso hídrico nace o pasa, sería una desventaja para nosotros”. La gran conclusión que ha convocado a la Plataforma y a sus socios por cerca de seis años, permanece: en un territorio, solo “juntos” (unidos y articulados), se puede caminar hacia la sostenibilidad del agua.

Autor

WWF

WWF es la principal organización de conservación global, con presencia en más de 100 países y que cuenta con el apoyo de más de 5 millones de socios. Las acciones de WWF están enfocadas en seis grandes objetivos: especies, bosques, océanos, agua dulce, alimentación, clima y energía. WWF tiene además tres líneas de acción transversales: gobernanza política y social, finanzas y mercados.