Fue hace dos años cuando lo vimos por primera vez volar, después de verlo debutar en 2017 y de pruebas hechas en tierra en 2018. Ahora, después de que el avión haya cambiado de duelos, reinicia sus operaciones de prueba.

Según informó la compañía, Roc ha realizado una nueva prueba de vuelo. La prueba ha tenido lugar en el desierto de Mojave en California, Estados Unidos. Para que esto sea posible, hay un aeropuerto especial que permite el vuelo de aviones con una envergadura tan grande como Roc. El vuelo ha durado aproximadamente unas tres horas y diez minutos.

Hipersónicos y vehículo de lanzamiento

¿Para qué un avión tan grande? Cuando al compañía fue fundada el propósito con este avión era claro: un avión lo suficientemente grande como para que levante otros aviones y naves. La idea era utilizarlo para colocar en órbita naves sin necesidad de utilizar cohetes, algo similar a lo que plantea Virgin Galactic.

Los planes han cambiado ligeramente, tras la adquisición de Stratolaunch por parte de Capital Management en octubre de 2019, cambiaron el enfoque de la compañía. Más que centrarse en el gigantesco avión para utilizarlo como vehículo de lanzamiento, van a centrarse en crear aviones hipersónicos (cinco veces la velocidad del sonido).

El año pasado pudimos ver cómo va a ser la futurista flota de aviones hipersónicos que preparan. Con estos aviones, la compañía espera alcanzar velocidades de hasta 7.400 km/h. ¿El papel de Roc? Servir como portaaviones para elevar a los hiperpsónicos y así ahorrar una importante cantidad de combustible (y peso) que colocar en ellos.

Dicho esto, Stratolaunch no descarta utilizar el gigantesco avión para transportar y levantar otras cargas aparte de sus hipersónicos. Puede ser particularmente útil para colocar naves en el aire o satélites a bordo de pequeños cohetes que luego lleguen a la órbita terrestre. ¿Las grandes ventajas de este método? Reutilizar el avión, lanzarlo desde casi cualquier aeropuerto y reducir el combustible necesario.