El cadmio es un metal pesado que se encuentra naturalmente en la corteza terrestre, y se acentúa en suelos cuyo origen es de tipo volcánico, por lo que en las cordilleras de los Andes es común que esté presente. Además de este proceso natural, hay actividades como la minería –ya sea de carbón, hierro u otros minerales– que al entrar en contacto con ciertas profundidades hacen que afloren metales como el cadmio, arsénico, plomo, mercurio. Tan solo en Cundinamarca, según datos de la Agencia Nacional de Minería, en 2022 había cerca de 848 títulos mineros otorgados, lo cual cubre 91 municipios de la región.

Además, hay fertilizantes que tienen como componente principal rocas fosfóricas que pueden contener cadmio, aumentando el problema; y otro factor es la hojarasca presente en los suelos cacaoteros, pues es el principal fertilizante. “La planta absorbe el cadmio, lo lleva a sus hojas, estás caen y nuevamente vuelven a su organismo, y hasta el momento no hay una alternativa económica y viable que pueda reemplazar este método. El cadmio no va a desaparecer de los suelos, pero la idea es generar una competencia, en la que microorganismos como los hongos lo absorben y disminuyan las concentraciones en las plantas de cacao, que han demostrado acumular cantidades muy altas”, asegura el investigador Diego Alejandro González Bello, magíster en Ciencias Agrarias, quien caracterizó los hongos presentes en fincas ubicadas en Yacopí.

Según datos de la Gobernación de Cundinamarca, en 2020 el departamento tuvo una producción de 2.127 toneladas de cacao, aportando un 3% de este rubro en todo el país; además, se estima que en 27 municipios de esta región hay más de 4.400 familias cuyo sustento económico depende de la siembra de este fruto, que ocupa cerca de 8.000 hectáreas.

El cacao es utilizado en productos como el chocolate, y el de Colombia es reconocido en el mundo por su aroma, textura y sabor. Hace algunos años ha ganado fuerza en mercados internacionales que tienen como competidor a países como Ghana o Costa de Marfil, principales productores del grano en el mundo.

El magíster, integrante del grupo de investigación Agrobiodiversidad y Biotecnología de la UNAL, liderado por la profesora Esperanza Torres, identificó 2.120 géneros distintos de hongos que viven en estas fincas, de los cuales 51 son los más frecuentes en los lugares con mayor concentración de cadmio.

Dos en especial se han robado el protagonismo, pues son capaces de acumular hasta 2.000mg/kg, algo nunca antes visto, y que estaría asociado, según estudios del grupo, a genes que se dedican básicamente a transportar y almacenar el cadmio dentro del hongo.

“Aunque algunos géneros han sido descritos, la mayoría no habían sido reportados; y el 40% de los que se encontraron aún no han sido categorizados, por lo que se abre todo un mundo de posibilidades en los que la clave para arrebatar el cadmio a las plantas de cacao está en los particulares mecanismos celulares de estos pequeños hongos”, indica el magíster González.

Entre los procesos más destacados están la absorción y acumulación de cadmio en las paredes de sus células, utilizando moléculas llamadas “exopolisacaridos”, que ayudan a que el organismo inactive o corte el efecto del cadmio; o la acumulación en sus vacuolas, órgano que actúa como bolsa de reserva para almacenar nutrientes, pero que también se encarga de acumular sustancias tóxicas para eliminarlas.

“Los hongos tienen una ventaja frente a las bacterias que habitan estos cultivos, y es que no necesitan estar vivos para funcionar como bioacumulador de cadmio, así que su potencial es altísimo para la industria, pero necesitan de una mayor investigación, pues se estima que por cada 20 bacterias reportadas en estos cultivos, tan solo se conoce un hongo”, asegura.

Diego Alejandro González Bello, magíster en Ciencias Agrarias, analizando algunas muestras. Fuente: Laura Londoño, profesional de comunicaciones del CIER de la Facultad de Ciencias Agrarias.Diego Alejandro González Bello, magíster en Ciencias Agrarias, analizando algunas muestras. Fuente: Laura Londoño, profesional de comunicaciones del CIER de la Facultad de Ciencias Agrarias.

Gráfico con algunos géneros de hongos encontrados en los suelos cacaoteros. Fuente: Diego Alejandro González Bello, magíster en Ciencias Agrarias.Gráfico con algunos géneros de hongos encontrados en los suelos cacaoteros. Fuente: Diego Alejandro González Bello, magíster en Ciencias Agrarias.

Añade que se ha estigmatizado a los hongos por algunas especies como Fusarium oxysporum, que son causantes de marchitamiento y daños en los conductos vasculares de las plantas, imposibilitando transporte de nutrientes en cultivos como el de uchuva o de banano, y acabando con todo en muy poco tiempo.

Hojarasca que es utilizada como el principal fertilizante de los suelos cacaoteros. Fuente: Diego Alejandro González Bello, magíster en Ciencias Agrarias.

El grupo ha identificado que en los cultivos hay plantas que acumulan cadmio de manera desmedida y no tienen ningún daño interno aparente, de hecho, no se ha reportado la primera planta de cacao que haya muerto por cadmio, lo cual es desconcertante. En Santander hay árboles de casi 80 años que tienen altas concentraciones del metal pesado.

En el municipio de Yacopí se seleccionaron tres fincas, dos con concentraciones de cadmio menor a 2mg/kg, y una que superaba los 5mg/kg. Allí se tomaron muestras de suelo en tres puntos distintos: de 0 a 30cm, de 31 a 100, y en suelo rizosférico, que es aquella fracción del suelo en la que hay una estrecha comunicación entre las raíces de la planta y el suelo.

Se realizaron extracciones de ADN del suelo, que era de 25 miligramos por cada muestra, se usó tecnología de secuenciación masiva de nueva generación, y se llevaron a cabo asignaciones taxonómicas para identificar todos los tipos de hongos presentes.

El estudio de concentraciones de cadmio se hizo tanto en hojarasca como en frutos de cacao, y este último punto es clave, porque superaba los niveles permitidos y lleva a preguntas como ¿cuál es su impacto en la salud humana?

Un consumo que no está regulado

De manera curiosa el investigador cuenta que hay agricultores de estas zonas que llevan consumiendo productos derivados de su cacao con altas concentraciones de cadmio toda la vida, y dicen no haber tenido ningún problema de salud severo; sin embargo, esto no necesariamente es así.

Las altas concentraciones de cadmio pueden generar graves problemas en la salud de las personas. Fuente: Nicol Torres – Unimedios.

El médico cirujano y magíster en Toxicología de la UNAL, David Andrés Combariza, afirma que las afectaciones en el organismo por una ingesta alta de cadmio en la alimentación pueden ir desde una irritación estomacal, vómito o diarrea, hasta problemas graves por una exposición prolongada de dosis superiores a lo permitido, entre ellos, reducción del calcio en los huesos, un mayor riesgo de problemas en los riñones, e impactos cardiovasculares que podrían ser irreversibles.

“Se han propuesto medicamentos llamados quelantes, que capturan y eliminan ciertos metales, sin embargo, aún no se cuenta con una evidencia sólida que demuestre una reducción importante del riesgo”, asegura el experto.

Añade que, habría que analizar con detalle el caso de los agricultores antes mencionados, pues puede ocurrir que algunos alimentos contaminados no hagan que el cadmio quede disponible en el cuerpo, o que tengan efectos o síntomas que no han sido detectados.

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