logo móvil
Portada

Imagen. / Molinos en el Campo de Criptana, en la Mancha, los mismos que Don Quijote confundía con gigantes. © Lourdes Cardenal.

2025-08-01

Orígenes, funcionamiento e importancia ambiental de la energía eólica


La energía eólica es una de las formas más antiguas y limpias de aprovechamiento energético utilizadas por la humanidad. Basada en la capacidad de transformar el movimiento del viento en energía útil, esta fuente renovable ha evolucionado desde simples mecanismos mecánicos hasta convertirse en una pieza clave de la transición energética global. En el contexto de la crisis climática y la necesidad urgente de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, la energía eólica representa una alternativa viable, sostenible y tecnológicamente madura.

Los orígenes de la energía eólica: una herencia milenaria

El uso del viento como fuente de energía se remonta a las primeras civilizaciones humanas. Se han hallado registros del uso de embarcaciones con velas en Egipto alrededor del 3000 a. C., donde el viento servía como fuerza motriz para la navegación fluvial. Posteriormente, hacia el siglo VII d. C., surgieron los primeros molinos de viento en Persia (actual Irán), utilizados para moler grano y bombear agua. Estos molinos verticales, impulsados por telas o velas, marcaban un hito en el aprovechamiento de la energía cinética del viento para fines agrícolas y domésticos.

Durante la Edad Media, el uso de molinos se extendió a Europa, particularmente en los Países Bajos, donde alcanzaron un alto grado de sofisticación. Los molinos holandeses, con sus estructuras giratorias, fueron fundamentales en la agricultura, la molienda de cereales y la desecación de tierras. Ya en el siglo XIX, con la revolución industrial, comenzaron a construirse aerogeneradores experimentales en Dinamarca y Estados Unidos. En 1888, Charles F. Brush diseñó una de las primeras turbinas generadoras de electricidad en Cleveland, Ohio, marcando la transición de los usos mecánicos a la producción energética moderna.

En el siglo XX, el interés por la energía eólica resurgió con fuerza, sobre todo durante las crisis del petróleo en los años setenta. Este impulso permitió el desarrollo de aerogeneradores más eficientes, hasta llegar a los modelos actuales de turbinas eólicas de eje horizontal con generadores eléctricos incorporados. En este recorrido histórico, la energía eólica ha pasado de ser una herramienta rudimentaria a una tecnología estratégica para enfrentar los desafíos energéticos del siglo XXI.

Molino de viento de Charles Brush, el primero en generar electricidad. © Robert W. Righter.

Principios de funcionamiento de la energía eólica

La energía eólica se basa en la conversión de la energía cinética del viento en energía mecánica, que luego se transforma en energía eléctrica mediante un generador. Este proceso se realiza a través de dispositivos llamados aerogeneradores, que constan de varias partes clave: rotor, eje, generador y torre. Las palas del rotor, diseñadas aerodinámicamente, capturan la energía del viento y la convierten en movimiento rotatorio. Este movimiento se transmite a un eje central conectado a un generador, el cual produce electricidad.

Los aerogeneradores modernos suelen ser de eje horizontal, con palas orientadas automáticamente hacia la dirección del viento mediante sistemas de control activos. El rendimiento del aerogenerador depende de factores como la velocidad del viento, la altura de la torre y el diseño de las palas. Según la Administración de Información Energética de EE. UU. (EIA), la potencia generada por una turbina es proporcional al cubo de la velocidad del viento, lo que hace que pequeños aumentos en la velocidad se traduzcan en significativas mejoras en la producción energética.

Existen dos tipos principales de instalaciones eólicas: terrestres y marinas. Las terrestres se sitúan en zonas elevadas o con vientos constantes, mientras que las marinas (offshore) aprovechan la mayor estabilidad y fuerza del viento en altamar. Estas últimas, aunque más costosas, permiten instalar turbinas de gran tamaño y generan mayor cantidad de energía.

El sistema de producción eólica se integra a redes eléctricas mediante subestaciones que regulan el voltaje y aseguran la estabilidad del suministro. Además, se están desarrollando tecnologías de almacenamiento energético, como baterías de gran capacidad, para compensar la intermitencia inherente al recurso eólico.

Importancia de la energía eólica en la conservación ambiental

Una de las mayores fortalezas de la energía eólica es su carácter renovable y limpio. A diferencia de los combustibles fósiles, la energía eólica no emite dióxido de carbono (CO2) ni otros gases contaminantes durante su operación, lo cual contribuye significativamente a la mitigación del cambio climático. Así, una turbina eólica promedio puede evitar la emisión de hasta 1500 toneladas de CO2 al año, dependiendo de su ubicación y capacidad.

Además, el viento es un recurso inagotable, ampliamente disponible en muchas regiones del planeta, lo que reduce la dependencia energética de fuentes no renovables y mejora la seguridad energética de los países. También disminuye la necesidad de extracción y transporte de combustibles fósiles, actividades que generan impactos ambientales y sociales negativos, como la contaminación de aguas y suelos o los conflictos geopolíticos asociados al petróleo y el gas.

En términos de uso del suelo, la energía eólica permite la coexistencia con actividades agrícolas y ganaderas, ya que las turbinas pueden instalarse en zonas rurales sin impedir el uso del terreno circundante. Asimismo, su huella hídrica es prácticamente nula, lo que representa una ventaja frente a otras fuentes de generación como la térmica o la nuclear, que requieren grandes cantidades de agua para su funcionamiento.

No obstante, la instalación de parques eólicos también presenta desafíos ambientales y sociales. Entre ellos se encuentran el impacto visual en paisajes naturales, la posible interferencia en rutas migratorias de aves y murciélagos, y la oposición de comunidades locales por ruido o cambios en el entorno. Por esta razón, se requiere una planificación adecuada, evaluaciones de impacto ambiental rigurosas y estrategias de participación comunitaria para asegurar un desarrollo sostenible.

Perspectivas de la energía eólica

El desarrollo de la energía eólica continúa creciendo a nivel global. La capacidad eólica instalada superó los 900 gigavatios en 2023, y se proyecta que alcanzará los 1200 GW antes de 2030. Este crecimiento está impulsado por los avances tecnológicos, la reducción de costos y el apoyo de políticas gubernamentales orientadas a la transición energética.

Entre las tendencias más prometedoras se encuentra la expansión de la energía eólica marina, con proyectos de turbinas flotantes que permiten su instalación en aguas profundas. También se trabaja en aerogeneradores de mayor tamaño y eficiencia, con torres que superan los 200 metros de altura y palas de hasta 100 metros de longitud. Estas innovaciones permitirán aprovechar mejor el recurso eólico en distintas condiciones geográficas.

Otro ámbito emergente es la combinación de energía eólica con sistemas de almacenamiento y redes inteligentes (smart grids), lo cual aumentará la estabilidad del suministro y facilitará la integración de múltiples fuentes renovables. En paralelo, la digitalización y la inteligencia artificial están optimizando el mantenimiento predictivo de turbinas, reduciendo tiempos de inactividad y mejorando la gestión operativa.

Desde una perspectiva ambiental, el crecimiento de la energía eólica representa una oportunidad para reducir la huella ecológica de la humanidad y avanzar hacia un modelo energético más justo y sostenible. No obstante, su expansión debe realizarse con criterios de equidad, transparencia y respeto por los ecosistemas y las comunidades locales.

La energía eólica es una manifestación tangible de cómo el conocimiento técnico y el respeto por la naturaleza pueden converger en soluciones sostenibles. Desde los antiguos molinos persas hasta los modernos parques eólicos marinos, el ser humano ha sabido canalizar la fuerza del viento para satisfacer sus necesidades energéticas. En un contexto de crisis climática global, esta fuente renovable no solo representa una alternativa viable, sino también un símbolo de compromiso con el futuro del planeta. Comprender su historia, su funcionamiento y su impacto ambiental es fundamental para impulsar una transición energética consciente, inclusiva y duradera.

Para saber más…

Si desea ampliar sus conocimientos sobre energía eólica, puede consultar las infografías Montaje molinos de viento GaviotasEnergía eólica y Tecnologías y sostenibilidad, así como el showroom Turbina eólica, en Virtualpro.


Referencias

Andrés Blanco, T. (2025). Energía eólica: ¿qué es, cómo funciona y cuáles son sus beneficios?
https://www.bbva.com/es/sostenibilidad/que-es-la-energia-eolica-la-importancia-del-viento-como-renovable/

Cardenal, L. (2024). Campo de Criptana Molinos de Viento 1.jpg. [Imagen] Wikimedia Commons.
https://commons.wikimedia.org/w/index.php?title=File:Campo_de_Criptana_Molinos_de_Viento_1.jpg&oldid=846910369

Iberdrola. (2025). Historia de la energía eólica: desde sus orígenes hasta la sostenibilidad moderna.
https://www.iberdrola.com/conocenos/nuestra-actividad/energia-eolica-terrestre/historia

National Grid. (2024). The history of wind energy.
https://www.nationalgrid.com/stories/energy-explained/history-wind-energy

Righter, R. (2023). File:Wind turbine 1888 Charles Brush.jpg. [Imagen]. Wikimedia Commons.
https://commons.wikimedia.org/w/index.php?title=File:Wind_turbine_1888_Charles_Brush.jpg&oldid=805776016

U. S. Energy Information Administration (EIA). (2023). Wind explained. History of wind power.
https://www.eia.gov/energyexplained/wind/history-of-wind-power.php


Felipe Chavarro
Copy editor
Virtual Pro
[email protected]

Autor
Imagen Revista Virtualpro

Revista Virtualpro

Publicación virtual académico-científica, indexada a nivel Latinoamérica. Presenta la información de una forma innovadora a través de documentos hipertexto, multimedia e interactivos que complementan el proceso de enseñanza-aprendizaje en diferentes programas académicos relacionados con procesos industriales. Cuenta con un comité editorial y científico internacional ad honorem presente en diferentes países de Latinoamérica.

Noticias más leídas

Temas Virtualpro