Composición nutricional y aspectos de seguridad de los caracoles de mar profundo (Kuroda)
Autores: Mansoor, Sana; Lee, Jin-Hwa; Bashir, Khawaja Muhammad Imran; Sohn, Jae-Hak; Choi, Jae-Suk
Idioma: Inglés
Editor: MDPI
Año: 2024
Acceso abierto
Artículo científico
Categoría
Tecnología e Industria de alimentos
Licencia
CC BY-SA – Atribución – Compartir Igual
Consultas: 15
Citaciones: Sin citaciones
El caracol marino profundo Kuroda es muy codiciado como alimento en países del este asiático, especialmente en Corea y Japón. Sin embargo, carece de reconocimiento oficial como producto alimenticio en Corea. Este estudio tuvo como objetivo evaluar su composición nutricional y seguridad para el desarrollo potencial de productos marinos. El análisis nutricional reveló altos contenidos de proteínas (13,54-20,47 g/100 g de caracol), grasas (0,85-8,59 g/100 g de caracol), carbohidratos (1,55-12,81 g/100 g de caracol) y fibra dietética (1,25-1,95 g/100 g de caracol) en muestras tanto de músculo como de intestino, con contenidos energéticos que van desde 339,11 +/- 1,64 hasta 692,00 +/- 3,21 kJ/100 g. Minerales clave, como hierro, potasio, calcio y sodio, y ácidos grasos esenciales, como ácido eicosapentaenoico, ácido docosahexaenoico, ácido araquidónico, ácidos grasos omega-3 y omega-6, fueron abundantes, lo que lo convierte en un alimento suplementario potencial. Es importante destacar que los niveles de metales pesados cumplían con los estándares coreanos de seguridad alimentaria. No se detectaron grasas trans, radiactividad relacionada con los isótopos radiactivos Cs/Cs e I, ni bacterias patógenas. Esto confirma la seguridad y el valor nutricional de los caracoles marinos profundos, lo que sugiere su potencial para desarrollar productos marinos ricos en componentes beneficiosos, lo que podría mejorar la nutrición y la seguridad alimentaria, al tiempo que contribuye al crecimiento económico.
Descripción
El caracol marino profundo Kuroda es muy codiciado como alimento en países del este asiático, especialmente en Corea y Japón. Sin embargo, carece de reconocimiento oficial como producto alimenticio en Corea. Este estudio tuvo como objetivo evaluar su composición nutricional y seguridad para el desarrollo potencial de productos marinos. El análisis nutricional reveló altos contenidos de proteínas (13,54-20,47 g/100 g de caracol), grasas (0,85-8,59 g/100 g de caracol), carbohidratos (1,55-12,81 g/100 g de caracol) y fibra dietética (1,25-1,95 g/100 g de caracol) en muestras tanto de músculo como de intestino, con contenidos energéticos que van desde 339,11 +/- 1,64 hasta 692,00 +/- 3,21 kJ/100 g. Minerales clave, como hierro, potasio, calcio y sodio, y ácidos grasos esenciales, como ácido eicosapentaenoico, ácido docosahexaenoico, ácido araquidónico, ácidos grasos omega-3 y omega-6, fueron abundantes, lo que lo convierte en un alimento suplementario potencial. Es importante destacar que los niveles de metales pesados cumplían con los estándares coreanos de seguridad alimentaria. No se detectaron grasas trans, radiactividad relacionada con los isótopos radiactivos Cs/Cs e I, ni bacterias patógenas. Esto confirma la seguridad y el valor nutricional de los caracoles marinos profundos, lo que sugiere su potencial para desarrollar productos marinos ricos en componentes beneficiosos, lo que podría mejorar la nutrición y la seguridad alimentaria, al tiempo que contribuye al crecimiento económico.