La diabetes mellitus se está convirtiendo en un problema de salud cada vez más grave, y los compuestos bioactivos que se encuentran en las algas marinas pueden ofrecer opciones prometedoras para su manejo. Estos compuestos incluyen polisacáridos, polifenoles, ácidos grasos insaturados y fibra dietética, todos los cuales tienen el potencial de alterar los trastornos del metabolismo de la glucosa y los lípidos. Sin embargo, se necesita más investigación para entender cómo funcionan estos compuestos, determinar las mejores dosis y encontrar métodos de entrega efectivos para el manejo de la diabetes. Si bien las sustancias derivadas de algas, como el fucoidán y los polisacáridos de algas rojas, muestran potencial, se requieren más estudios para identificar compuestos beneficiosos específicos, establecer niveles de consumo seguros y evaluar su seguridad a largo plazo. Además, la baja biodisponibilidad de las algas y el impacto de sus paredes celulares en la absorción de nutrientes deben ser abordados. A pesar de estos desafíos, agregar algas a una dieta equilibrada podría servir como una alternativa a los tratamientos tradicionales de la diabetes, con la posibilidad de aplicaciones médicas más amplias una vez que se valide su seguridad y efectividad.